jueves, 13 de septiembre de 2012

Mis primeros pasos - First Steps




Paseando un día por un mercadillo me acerqué a un puestecito donde vendían broches de Fimo que me llamaron la atención. Eran muñequitas especializadas en diferentes profesiones, pero mi caso no era muy común y no pude identificarme con ninguna. 

Por suerte tenían también algunas sin determinar, y allí encontré a la que más se parecía a mí. Encantada me colgué de la solapa a la rubita de los rizos con su vestido verde de tablas, y se vino conmigo a casa. 

Después de mirarla, remirarla, darle la vuelta y estudiar el mecanismo de adhesión del broche a esa pasta desconocida para mí, sólo era capaz de pensar: ¡¡ Ésto también lo puedo hacer yo!!.

Y así fue como empecé a interesarme por el Fimo y su entorno. A los 2 días ya había hecho mi primer pedido por internet, y un día después tenía la maravillosa pasta de colores en casa dispuesta a dejarse modelar para que yo pudiera entretenerme y dejar volar mi imaginación.

Jamás en mi vida había modelado arcillas poliméricas y no tenía información sobre las técnicas. Sólo sabía que esa "plastelina" me iba a dejar hacer lo que quisiera. No sé por qué extraña razón decidí empezar por lo más difícil sin haber visto un triste vídeo informativo: Hacer mi primer broche de muñeco. 

Para ser la primera vez no fue tan desastroso, pero me sirvió para darme cuenta de que quedaba mucho camino por hacer y demasiadas técnicas por aprender. 

Aquí os dejo al primer Carletes que entró en el horno, al que después seguirían infinidad de creaciones más.